Los cereales son uno de los alimentos básicos para tener una dieta saludable y equilibrada, y en los últimos años ha habido un cereal que ha ido ganando terreno y cada vez más personas optan por incluirlo en sus dietas. Nos referimos a la avena, un cereal que contiene minerales, vitaminas y antioxidantes, además de una alta cantidad de fibra cuando se consume sin refinar. A lo largo de este artículo descubriremos todos los beneficios que nos aporta el consumo de avena y que la convierten en el cereal ideal para incluir en la dieta de los pequeños.
Aunque la mayoría de los cereales deben introducirse en la dieta del bebé a partir del año, la avena puede ofrecerse al bebé a partir de los 6 meses debido a que es libre de gluten. Sin embargo, es importante que, al comprarla, elijas la menos procesada y que el paquete certifique que es libre de gluten, esto, porque la avena puede contaminarse con productos de trigo durante el procesamiento.
Ciertamente, una de las recetas que puedes preparar a tu bebé en esta etapa, es el porrigde o papilla de avena, un plato donde combinas harina de avena con leche, que puede ser materna, de fórmula, completa. A esta preparación puedes agregarle también frutas frescas, claro está, dependiendo de la edad del bebé.
Cómo ofrecer papilla de avena a tu bebé
Si decides darle avena a tu bebé de 6 meses, puedes comenzar ofreciéndola en papilla solo con leche materna. En cuanto a la cantidad, ofrece de 3 a 4 cucharadas de avena al día para proporcionar suficiente fibra y nutrientes a tu bebé. Después de unos meses podrás duplicar o triplicar la cantidad.
Ahora bien, ten en cuenta que no debes endulzar el porrigde con azúcar refinada, ni con otros ingredientes que no tengan la aprobación del pediatra. Lo ideal es que el dulzor lo aporte una fruta apta para su edad.
Puedes ofrecer papilla de avena a tu bebé unas 3 veces a la semana. Lo adecuado es que antes de incluir la avena o cualquier otro alimento al bebé cuentes con la aprobación del pediatra, quien te dará indicaciones sobre la frecuencia y la manera de incluir este cereal en su dieta.
Beneficios que aporta el porridge de avena para bebés
La avena es considerada un super alimento debido a su composición. Estos son los principales beneficios que aporta el porrigde de avena a la salud del bebé:
- Es rico en vitaminas y minerales: contiene fósforo, hierro, zing, magnesio y manganeso, además de vitaminas del grupo B, necesarios para el buen desarrollo de sus tejidos corporales.
- Aporta energía: la avena contiene hidratos de carbono de absorción lenta, que le aporta un extra de energía al bebé, para que crezcan, aprendan y adquieran destrezas motoras en esta etapa.
- Contiene proteínas: este macronutriente es necesario para el crecimiento y desarrollo optimo del bebé, y para el fortalecimiento y maduración del sistema inmune.
- Ayuda al buen desarrollo de sistema digestivo: la papilla de avena es rica en beta-glucano, una fibra soluble con efecto prebiótico en el intestino, es decir, que recubre y alimenta las bacterias buenas en el intestino, adecuado para el sistema digestivo inmaduro del bebé.
- Es saciante: puedes ofrecer al bebé porridge de avena durante la noche, esto puede ayudar a que el bebé no sienta hambre y duerma por más tiempo. Además, este alimento también es una fuente natural de melatonina, lo que favorecerá la conciliación del sueño del bebé.
- Mejora el tránsito intestinal: a partir de los 6 meses, cuando comienza la introducción de nuevos alimentos, los bebés pueden sufrir de episodios de estreñimiento. La papilla de avena ayuda a evitar este estreñimiento gracias a su alto contenido en fibra.
- Disminuye el riesgo de que desarrolle asma durante la infancia: según un estudio publicado en el British Journal of Nutrition, introducir la avena a partir de los 6 meses en la dieta de los niños, reduce el riesgo de que desarrollen asma.
Cómo hacer papilla de avena para bebés
La papilla de avena es una buena opción a la hora preparar una comida a tu bebé, ya que además de que resulta fácil de hacer y no requiere mucho tiempo para su preparación, puedes ofrecerla a cualquier hora del día. Seguidamente, te explicamos los pasos que debes seguir para prepararla:
- Para comenzar, necesitarás copos de avena, leche materna o leche de formula. La cantidad indicada para hacer papilla de avena es 1 parte de avena por cada 2 partes de leche materna o de fórmula. Si lo deseas también puedes agregar un poco de frutas frescas.
- Convierte los copos de avena en harina con textura fina. Para hacerlo puedes ayudarte de un procesador de alimentos o molinillo. Ten en cuenta que si compras la harina de avena directamente será necesario que la tuestes en un sartén a fuego lento por unos 2 minutos. Los copos de avena ya vienen previamente tostados, por lo que este paso no es necesario si los mueles.
- Seguidamente, vierte la leche en una olla y cuando esté tibia agrega la harina de avena. Cocina esta preparación a fuego suave de 3 minutos a 5 minutos o hasta que observes que la mezcla espese. Recuerda que debes revolverla constantemente para evitar que se formen grumos o se pegue. Si lo prefieres, puedes agregarle en este momento trozos de banana o ralladura de manzana.
- Espera a que la papilla esté tibia para ofrecerla a tu bebé.
Existen varias opciones de papillas de avena en el supermercado listas para el consumo del bebé, sin embargo, estas suelen tener grandes cantidades de azúcar, por lo que es recomendable que la prepares en casa. No obstante, si decides realizar la papilla de avena con leche materna o de formula debes tener en cuenta que este tipo de leches no deben hervirse o perderán sus propiedades. En este caso, deberás preparar la avena en agua y después unirlas. La proporción de leche y agua es en partes iguales.