A los 4 años aproximadamente, se establece preferencia por una mano u otra, es decir, a esta edad se puede saber si un niño es dietro o zurdo. Es importante tener en cuenta que si a esa edad un niño aún se muestra ambidiestro, podría tratarse de una condición de inmadurez motriz.
Sin embargo, podría existir un cambio de mano luego de los 4 años, siendo a los siete u ocho años, cuando el niño escoge la mano de la escritura que marcará su lateralidad definitiva. Si un pequeño usa de manera preferible y constante la mano, pie u ojo del mismo lado, significa que la lateralización es pura y definitiva. Pero, si por el contrario es diestro de mano y pie y zurdo de ojo, se habla de lateralidad cruzada.
Hace algunas décadas la zurdera era considerada una alteración y los padres intentaban por todos los medios que sus hijos usaran sua mano izquierda para escribir o comer. Bajo ese pensamiento errado, este simple gesto se consideró una aberración y de hecho, los niños zurdos eran discriminados en un mundo de diestros hasta hace solo algún tiempo.
Para fortuna con el desarrollo de la ciencia se logró determinar que la zurdera, característica que muestra un 10% de la población a nivel mundial, es realmente una manifestación de lo que ocurre en nuestro cerebro y médula espinal en el vientre materno.
El cerebro de los diestros vs zurdos
Ser diestro o zurdo no es una decisión personal ni está determinado por la educación o la cultura, como se pensaba antiguamente, sino que es un resultado de la lateralización cerebral y de la especialización y dominancia de los hemisferios. Conectados por el cuerpo calloso, el cerebro humano se divide en dos hemisferios cerebrales, el izquierdo y el derecho, los cuales se especializan en diferentes funciones neuronales y cognitivas. Por lo general, existe un hemisferio dominante que es el que controla la mayor parte de estas funciones de manera instintiva y automática, pero curiosamente, lo hace de manera cruzada.
Sin embargo, las diferencias cerebrales entre zurdos y diestros van más allá de la dominancia de los hemisferios. El cerebro de los zurdos tiene más materia gris en diez regiones específicas de la corteza del cerebro, relacionadas con la memoria, el control manual, la visión y el lenguaje. Asimismo, se conoce que los niños zurdos tienen una mayor sensibilidad y creatividad que los diestros, a la vez que reaccionan más rápidamente, debido a que tienen determinadas áreas cerebrales más desarrolladas.
Médula espinal, ahí comienza todo
Las diferencias en el cerebro de los niños diestros y zurdos son cada vez más patentes para la ciencia, pero no ha sido hasta hace poco que se ha encontrado la causa de estas divergencias. Antiguamente se pensaba que la preferencia de utilizar una u otra mano residía en la corteza motora cerebral, la cual le envía una señal a la médula espinal que se transforma en movimiento. Sin embargo, las diferencias en el cerebro responsables de que un niño sea diestro o zurdo empiezan a gestarse en el vientre materno y están relacionadas con la formación de la médula espinal.
Tras analizar la expresión genética en la médula espinal entre la octava y duodécima semana de embarazo, se estima que los fetos ya tienen una inclinación a utilizar su mano izquierda o derecha en el vientre materno. De hecho, a partir de la semana decimotercera ya se puede observar mediante ecografías cómo algunos bebés se chupan el dedo de la mano derecha mientras que otros prefieren hacerlo con la izquierda.
Sin embargo, lo interesante es que ¡la médula espinal y la corteza motora no están aún conectadas! Esto significa que la causa de que los niños sean zurdos o diestros en realidad no radica en el desarrollo cerebral, como se pensaba hasta hace poco, sino que sienta sus bases en el proceso de formación de la médula espinal.
El papel de los genes en niños zurdos y diestros
El hecho de que el 40% de los padres zurdos tengan hijos zurdos ha llevado a la ciencia a considerar la influencia de los genes en el desarrollo de la lateralidad y la dominancia de los hemisferios cerebrales.