alimentos para caída del cabelloLa caída del pelo en el posparto es completamente normal y se debe a los cambios hormonales que se producen en esta etapa. Una dieta equilibrada, ejercicio de forma moderada y usar productos capilares específicos ayudan a fortalecer el cabello después del embarazo.

El embarazo y el posparto provocan innumerables cambios en el cuerpo de la mujer y uno de ellos es la pérdida de cabello que puede producirse después de dar a luz.

Muchas mujeres aprecian que, tras haber tenido al bebé, su pelo empieza a caerse en cantidades considerables, lo que les puede producir cierta preocupación. Sin embargo, deben saber que es normal que suceda en esta etapa.

La caída excesiva de cabello (se produce en un 45% de las mujeres en el postparto) tendrá lugar entre el segundo y el cuarto mes después del nacimiento del bebé y se trata de un proceso fisiológico pasajero. Sin embargo, hay una serie de consejos que se pueden seguir para estimular el crecimiento del cabello durante este periodo.

¿Cómo afecta el embarazo al cabello?

  • Durante el primer trimestre del embarazo, la acción de la progesterona suele generar un cabello más debilitado y con menos brillo.
  • A partir del segundo trimestre, el incremento de hormonas tiroideas y estrógenos retarda la caída natural del pelo, llevando a que se éste se encuentre en fase anágena o de crecimiento constante y tenga una apariencia más fuerte y sana, por lo que se nota más denso y abundante.
  • Tras dar a luz, el 45% de las mujeres experimenta el efluvio telógeno derivado del posparto, ya que estas hormonas vuelven a su equilibrio natural y recuperan sus niveles habituales. Esto provoca que el pelo que había estado detenido en fase de crecimiento se caiga rápidamente y pase, en consecuencia, a estar en fase de reposo y se encuentre más débil o frágil.
  • La mayoría de mujeres volverán a su ciclo de crecimiento capilar habitual entre seis y doce meses tras el parto.

5 alimentos para prevenir la caída del cabello luego del parto

A continuación presentamos los grupos de alimentos que destacan por su contenido en los nutrientes que favorecen el ciclo natural de crecimiento del cabello. Por suerte, un mismo alimento puede tener varios de ellos. Revisemos.

1. Proteína animal y legumbres

Este grupo de alimentos está conformado por las carnes magras, huevos, pescados y lácteos descremados. Las legumbres son las arvejas, las lentejas, los frijoles, los garbanzos, entre otros. Estos son fuente de proteínas de alta calidad.

La estructura y el crecimiento del cabello puede afectarse por una baja ingesta de proteínas y de calorías. Sobre todo porque el folículo del cabello está hecho de proteína y la necesita.

Además, estos alimentos contienen otros nutrientes que favorecen la salud capilar. Por ejemplo, los huevos aportan biotina, una vitamina que se usa para producir la proteína del cabello conocida como queratina.

Por otro lado, el grupo de alimentos proteicos también tienen hierro y zinc, dos nutrientes clave que también previenen la caída del cabello. En los alimentos de origen animal, estos minerales se absorben de forma sencilla.

2. Espinacas y otras hojas verdes

Las espinacas y otras hojas verdes, como las acelgas, contienen hierro y vitamina A que benefician el crecimiento del cabello.

De hierro contienen 3 miligramos por cada 100 gramos de hojas, según se lee en la misma tabla nutricional. A pesar de ser un hierro de baja absorción, puede sumar a la ingesta diaria de la madre, sobre todo por la cantidad de sangre perdida durante el parto.

Las mujeres con caída de cabello pueden beneficiarse del consumo de hierro de la dieta al aumentar los valores de ferritina, un transportador de hierro en la sangre.

3. Nueces y semillas

Las nueces y las semillas como chía, linaza, girasol, entre otras, son fuentes importantes de zinc, vitaminas del complejo B y ácido graso alfa-linolénico, un precursor de los ácidos grasos omega-3 (EPA y DHA), los cuales se relacionan con el fortalecimiento del cabello.

La suplementación con omega-3 y omega-6 en mujeres evita la caída del cabello, mejorando la densidad y disminuyendo el porcentaje de efluvio telógeno.

El grupo de nueces y semillas también llevan vitamina E al cuerpo, un antioxidante potente que mantiene fortalecido el folículo del cabello. Esta vitamina también se encuentra en aceites como el de oliva virgen extra.

Un puñado de nueces al día (40 gramos) o de semillas preferiblemente tostadas estará bien para la nutrición durante el posparto.

4. Pescados grasos

Los pescados grasos como el salmón, las sardinas, el boquerón, la caballa, el atún, el carite, entre otros, se distinguen por ser la fuente principal de los omega-3 DHA y EPA. Tal como se señaló en el párrafo anterior, estos ácidos grasos promueven el crecimiento del cabello.

Además, como lo señala la tabla de nutrientes de la USDA, los pescados grasos también contienen vitamina D que, como ya comentamos, se asocia a la salud capilar.