Una fobia es un miedo incontrolable, irracional y persistente a un objeto, una situación o una actividad. El miedo que sienten las personas con fobias puede ser tan grande que algunas personas llegan a hacer cosas extremas para evitar enfrentar sus miedos. Una respuesta extrema al origen de la fobia puede ser un ataque de pánico.
A su corta edad, nuestros niños pueden enfrentar fobias ante ciertas circunstancias. Por eso, en esta oportunidad queremos ofrecerte herramientas para que los ayudes a superarlas.
Para algunas mamás puede parecer inaudito que sus pequeños sean capaces de experimentar ataques de pánico generados por una situación u objeto en específico. Pero los expertos señalan que a partir de los cinco años, los niños pueden desarrollar miedos y fobias que al no ser atendidos pueden agravarse.
La diferencia entre el miedo y la fobia es que el miedo es una sensación pasajera, que no supone gran afectación en el estado mental y emocional de quién lo experimenta.
Mientras que la fobia es un trastorno que puede desatar una cadena de reacciones que pueden ocasionar alteracion del ritmo cardiaco, ataques de ansiedad y desmayos.
Miedos o Fobias, ¿Como Identificarlos?
Las fobias se caracterizan por ser miedos irracionales, recurrentes, de una intensidad pasmosa e inexplicable, es decir, el niño puede sentirse incapaz de moverse o reaccionar de manera lógica ante el sujeto o situación que despierta su temor.
La fobia es un miedo intenso e irracional en nuestros niños que necesitan atención de un especialista.
Los síntomas más visibles son temblores, aceleración del ritmo cardíaco, sudoración excesiva, incremento de la ansiedad, pérdida de los reflejos motores (no es capaz de correr), dificultad para respirar y perdida momentanea de la lucidez y la conciencia (desmayos).
Si sospechas que tu pequeño puede ser víctima de alguna fobia, debes llevarlo con un médico para que confirme o descarte el diagnóstico.
En caso de comprobar que se trata de una fobia, el especialista indicará cuál es el tratamiento más conveniente, puede elegir entre psicoterapias individuales y para el grupo familiar, sesiones de relajación o administración de farmacos.
Lista de fobias más comunes en los niños
Claustrofobia: Miedo rotundo a quedarse encerrado en espacios pequenos. Estos episodios ocurren cuando van en el coche, al subirse a un ascensor, es decir, en una estancia pequena.
Agorafobia: Se refiere al miedo que aparece cuando el nino se encuentra en espacios abiertos y esta directamente asociado al temor de perderse y sentirse desorientado.
Coulrofobia: Es el miedo a los payasos, bufones y mimos, cuyo exceso de maquillaje puede causar un nivel elevado de desconfianza en los ninos. Existen imagenes terrorificas de payasos, como el de la pelicula IT (Eso, por su traduccion en espanol) que pueden desencadenar la fobia.
Nictofobia: Asi es como se denomina al miedo a la oscuridad, y se trata de una de las fobias mas comunes entre ninos de cinco a diez anos. Los expertos explican que esta fobia se debe a la sensacion de vulnerabilidad ante la imposibilidad de ver en ausencia de luz.
Por esta razon es que los ninos y, en ocasiones, los adultos, pueden alucinar con seres extranos en medio de la oscuridad.
Fobia a la escuela: Este es un tipo de fobia social que se presenta cuando el nino de manera involuntaria sufre dolores estomacales, fiebre, vomitos y dolores de cabeza para no ir a la escuela.
Asustar a los ninos para pretender controlarlos puede desencadenar diversas fobias.
¿Los Padres Podemos Contribuir a la Aparicion de Fobias?
El desarrollo conductual de nuestros hijos es influenciado directamente por su entorno y por las personas que están a su cargo. Por esta razón es que los padres pueden ser considerados como responsables de los miedos y fobias que sufren sus hijos.
Investigaciones han demostrado que muchas de estas fobias han surgido por temores infundados por los padres para controlar a los pequeños y hacer que tengan un “buen comportamiento”.
Todo indica que el temido “coco” o monstruo, con el que se amenaza a los niños para que obedezcan o se vayan a dormir, no es una estrategia inofensiva.
Una situación similar ocurre con la exposición irresponsable a factores como la televisión. Si los padres no supervisan que programación observan sus pequeños, es posible que vean en pantalla situaciones de violencia que devengan en fobias especificas o sociales.
Ante este riesgo, se recomienda a los padres limitar el uso de la televisión en casa a solo un par de horas, y a seleccionar de manera adecuada los programas que se sintonizan de acuerdo a la edad de los niños.
Como padres debemos garantizar a nuestros hijos un ambiente seguro y armonioso para su correcto desarrollo emocional y conductual. Asimismo, debemos tener en cuenta la importancia de reforzar la comunicacion durante toda las etapas de su crecimiento.
Recordemos que un niño que se siente seguro y apoyado por sus padres, será un niño feliz y automáticamente se alejará de miedos y fobias innecesarios en su crecimiento.