Cuidar las manos durante el embarazo es tan importante como cuidar la piel del resto del cuerpo. No obstante, suelen ser las más olvidadas en esta etapa, y más allá de embellecer las uñas, no solemos brindarle los cuidados apropiados.
Por eso, hoy te vamos a contar qué rutinas implementar para darle vida y suavidad a tus manos mientras transitas la dulce espera. ¡No te lo pierdas!
Cambios de las manos durante el embarazo
Durante el embarazo se pueden experimentar diversos cambios en las manos, de carácter transitorio.
- Edema generado por el acumulo fisiológico de líquidos de este período.
- Eritema y el prurito en las palmas y en las plantas provocadas los cambios en los niveles de ciertas hormonas. Estos síntomas desaparecen por sí solos luego del parto, cuando los niveles hormonales se estabilizan.
- Dolor y el entumecimiento en el dedo índice, pulgar, mitad del dedo anular y el dedo medio puede ser ocasionado por el síndrome del túnel carpiano. Esta afección es bastante común en las mujeres encinta, como complicación de la acumulación fisiológica de líquido en la muñeca.
Incluso, las alteraciones hormonales privan a la superficie cutánea de la oleosidad y la elasticidad de siempre, lo que favorece a
la sequedad de la piel de todo el cuerpo.
Consejos para cuidar las manos durante el embarazo
Mantener cuidadas las manos durante el embarazo es tan importante como cuidar el resto del cuerpo. De hecho, los climas extremos impactan de manera especial sobre la piel, principalmente el frío seco.
Existen algunos consejos básicos para cuidar las manos en el embarazo sin necesidad de recurrir a costosos tratamientos. ¡Apunta!
Lava tus manos con frecuencia
La limpieza de las manos de forma regular elimina a las células muertas de la capa más superficial, las cuales pueden contribuir a la sensación de piel seca.
Hay que evitar los jabones desodorantes, ya que contienen componentes que absorben la humedad. Lo ideal es utilizar jabón cuando sea necesario, sin abusar de su uso en ningún momento. Además, se desaconseja el uso de jabón líquido antibacteriano, pues al remover las bacterias “buenas” de la piel, se quita un factor de protección del tejido cutáneo.
Otro aspecto a controlar es la temperatura del agua. Si bien el agua caliente reduce la presencia de gérmenes, su uso regular empeora la sequedad de la piel.
Humecta tus manos constantemente
Aplicar cremas o emolientes humectantes luego del enjuague de manos contribuye a sellar el agua y evitar que se pierda. En especial, en los climas ventosos o fríos.
Se aconseja reaplicar con bastante frecuencia durante el día y antes de irse a dormir por la noche. En general, los productos indicados son los que no contienen perfume, debido a que la gran mayoría de las pieles secas también suelen ser sensibles.
Opta por una alimentación balanceada y una hidratación suficiente
Siempre que se trate de la piel, la alimentación cumple un rol muy importante, pues “somos lo que comemos”.
Por lo tanto, lo ideal es intentar incluir grasas saludables (poliinsaturadas y cis) en la alimentación, que se encuentran en los siguientes alimentos:
- Aguacate.
- Nueces.
- Aceite de oliva extra virgen.
- Aceite de canola.
Beber suficiente agua durante todo el día también contribuye a mantener la piel saludable y húmeda.
Realiza exfoliaciones eventuales
Para ofrecerle un buen cuidado a las manos, hay que limpiarlas y eliminar sus impurezas y restos de células muertas. La exfoliación contribuye a esta tarea e incluso, le brinda un aspecto más joven y fresco a la piel. Además, la torna más receptiva al accionar de los humectantes y controla la aparición de lesiones. Para lograr resultados más efectivos se aconseja elegir aquellos producto que además contengan aceites.
Implementa una rutina de cuidados por las noches
Poner en práctica ciertos hábitos por las noches ayuda a acelerar el proceso de recuperación de las manos agrietadas y resecas. Para ello, una buena opción es aplicar aceite de almendras o vaselina para reponer las grasas esenciales encargadas de su humectación.
También existen en el mercado tratamientos específicos para las manos que, cuando se utilizan antes de acostarse, evitan la aparición de manchas y de arrugas.
Protégelas todos los días
Se aconseja utilizar guantes de limpieza a la hora de realizar las tareas domésticas (limpiar suelos, lavar platos, limpiar vidrios). Es decir, utilizarlos en cualquier actividad en la que se empleen productos químicos.
Y un dato no menor es aplicar el protector solar en el dorso de las manos antes de salir de casa, pues las manos son las más expuestas a los rayos UV.
La importancia de cuidar las manos en el embarazo
La piel de las manos no difiere mucho de la del resto del cuerpo. No obstante, necesita más cuidado por su contacto permanente con las diferentes superficies y agentes químicos. Por esto, regirse por los tres simples pasos es la técnica ideal: limpieza, humectación y protección.