La anemia durante el embarazo es un problema mucho más serio de lo que pueda parecer en un principio, ya que si no se trata como debiera podría causar serias complicaciones durante el momento de dar a luz. Sin embargo lo que es más normal, es que la mujer que acaba a dar a luz sufra anemia.
Ello se va a deber a que la mujer al dar a luz pierde grandes cantidades de sangre y ello origina que pueda llegar a tener una anemia postparto. En el siguiente artículo te hablamos de una manera más detallada de este tipo de anemia que suele afectar a aquellas mujeres que acaban de dar a luz.
Porqué se presenta la anemia porparto
La anemia postparto suele producirse como su mismo nombre indica al dar a luz y se prolonga durante unos dos meses más o menos. Son varias las causas por las que una mujer puede llegar a sufrir este tipo de anemia tras dar a luz a su bebé. La más habitual se debe a la falta de contracción dentro del útero.
Síntomas de la anemia posparto
Dichos síntomas van a depender en gran medida del tipo de anemia que padezca la reciente madre. Si la anemia no es muy grave, es posible que la mujer apenas presente síntomas. Si por el contrario, la anemia es considerable y grave, los síntomas presentados son los siguientes:
- Agotamiento y cansancio excesivo
- Mareo
- Bajada de la tensión arterial
- Dolor fuerte de cabeza
- Dificultades a la hora de dormir y conciliar el sueño
- Calambres en la zona de las piernas
Aunque son síntomas claros de la anemia postparto, son muchas las madres que se confunden al creer que dichos síntomas se deben a la cesárea sufrida o la lactancia materna. En cualquier caso, es esencial acudir al médico lo más pronto posible ya que de lo contrario, la mujer podría llegar a sufrir depresión postparto o ciertos problemas relacionados con el corazón.
Tratamiento de la anemia posparto
Lo primero que debe hacer la mujer es acudir al hospital y hacerse un análisis de sangre. Gracias a dicho análisis, el médico puede comprobar los niveles de minerales y de vitaminas que tiene dicha mujer en la sangre. A partir de aquí y si resulta que padece anemia, es importante el tratar tal problema de salud.
Si la anemia diagnosticada es de carácter leve, basta con tomar hierro de manera oral. Si la falta de hierro es más grave, es posible que la administración del mineral se deba hacer de manera intravenosa. Aparte de esto, la madre debe seguir un tipo de dieta que sea rica en alimentos con hierro.
En relación con la lactancia del bebé es importante saber que la misma se puede compatibilizar con la propia anemia. De esta manera la madre puede seguir un tratamiento para mejorar de la anemia y al mismo tiempo, seguir dando el pecho al pequeño. A pesar de la falta de hierro en la sangre de la madre, la leche de su pecho contiene todos los nutrientes que necesita el bebé para poder desarrollarse sin problema alguno.
En definitiva, la anemia postparto es un problema de salud bastante serio que se debe tratar lo más pronto posible. Es más normal de lo que pueda parecer en un principio y son muchas las madres que al dar a luz, terminan por padecer este tipo de anemia. Si no es así, la mujer puede sufrir serios problemas relacionados con la depresión postparto.
Cómo evitar la anemia posparto
1. Controles médicos: La anemia en el posparto se previene con antelación, cuidándote durante todas las etapas del embarazo y siguiendo los controles médicos que te aseguran que todo va bien en relación a tu salud y a la salud del bebé.
2. Alimentación equilibrada: El factor preventivo más importante a la hora de evitar la anemia en el posparto es una alimentación equilibrada y saludable que contenga todas las vitaminas y nutrientes.
3. Aumentar la ingesta de hierro en pastillas: No está de más aumentar la ingesta de hierro durante el embarazo, especialmente a partir del segundo trimestre, porque el momento del parto te hará perder mucha sangre.
4. Alimentos ricos en hierro: Procura consumir durante el embarazo alimentos ricos en hierro como espinacas, acelgas, uvas, soja, lentejas, yema de huevo y pescados. Así te aseguras que tus cantidades de hierro en el organismo se mantienen hasta el momento del parto.
5. Más vitamina C: Además de consumir alimentos ricos en hierro, conviene que tomes más vitamina C, que es la que se ocupa de la absorción del hierro. Los cítricos, las fresas, los kiwis o los pimientos no deben faltar en tu dieta en el embarazo.