Cuidar tu alimentación, llevar una dieta equilibrada, y prestar atención a la forma de dar el pecho influirá en el éxito para nutrir a tu bebé adecuadamente. De hecho, los nutricionistas recomiendan cumplir una dieta que tenga sabor y aromas diferentes mientras estés ofreciendo lactancia materna, pero ¿qué alimentos están permitidos? ¿puedo comer picante si estoy dando el pecho?
Diversos estudios científicos han demostrado que los bebés responden mejor a la leche materna cuando las madres varían los alimentos, logrando que la lactancia materna sea más atractiva para ellos, debido al olor y diversidad de sabores.
La idea es no limitar la ingesta de tus alimentos preferidos sin antes comprobar si el bebé está satisfecho con la dieta y no le está causando ninguna reacción o daño visible. La intención en todo momento es que además de cuidar la salud de tu hijo también puedas disfrutar lo máximo posible esta temporada. Por ello, si en este periodo deseas agregar algo de comida picante a su dieta mientras le ofreces el pecho, puedes hacerlo sin problemas de forma ocasional.
¿Se puede comer picante en el embarazo?
La respuesta no siempre está clara e incluir más variedad de alimentos parece “entrenar” las papilas gustativas del bebé cuando aún está en la barriga de su madre y que apruebe ciertos sabores cuando comience a probar la comida directamente, alrededor de los seis meses tras su nacimiento. Por lo tanto, la respuesta corta es que sí se puede comer picante en el embarazo, aunque con ciertas consideraciones.
De hecho, en algunas culturas como la mexicana, china, tailandesa e india las mujeres deben seguir comiendo lo que comían antes de quedarse embarazadas, sin renunciar a cosas cotidianas como el picante o la salsa, ni restringirlas durante el embarazo ni después del parto, sin embargo, este es solo un ejemplo de costumbres y gusto cultural.
¿Comer picante en la lactancia afecta al bebé?
Es normal que cuando una madre tiene que comenzar a dar el pecho se empiece a preguntar qué alimentos puede comer y cuáles serán dañinos para el bebé. Lo cierto es que una buena nutrición e hidratación es la clave para la producción exitosa de leche y el adecuado aporte de energía para la mujer durante todo el día.
En principio, puedes comer prácticamente cualquier alimento durante la lactancia, aunque evitando aquellos que en grandes cantidades son nocivos o peligrosos para la salud de la madre o el bebé, por ejemplo:
- Alcohol: pasa a la leche materna y puede irritar y alterar al bebé de forma negativa.
- Café: la ingesta de grandes cantidades de cafeína al día (tres tazas o más), también pasarán a la leche materna y pueden provocar que tu bebé esté irritable, molesto/a y no descanse adecuadamente. Los refrescos con cafeína producen el mismo efecto.
A pesar de que el picante parece no afectar a los bebés durante la lactancia, debido a sus propiedades y composición irritantes es recomendable consumirlo con moderación para evitar que afecte el estómago de las madres.
Beneficios y riesgos de comer picante en la lactancia
Comer picante durante la lactancia no daña al bebé y consumir este tipo de alimentos lo único que hará será cambiar el sabor de la leche y facilitará que sea menos extraño para el bebé incluirlos en su dieta posteriormente. Dentro de los beneficios de comer alimentos picantes se encuentran:
- Cuando los bebés empiecen a comer sólidos para complementar la leche, será más fácil aceptar el nuevo sabor de los alimentos que se les ofrezca.
- Ayuda a desarrollar las papilas gustativas de su bebé, por lo que es más probable que pruebe diferentes sabores, cuando comience a comer alimentos sólidos.
Por lo tanto, comer picante durante la lactancia no tiene riesgos comprobados para el bebé y los alimentos picantes solo afectarán el sabor de la leche materna. No obstante, algunas madres prefieren restringirlos durante la lactancia, pero esta acción no es necesaria, puesto que por el momento no se han encontrado evidencias de que las comidas picantes sean dañinas para su salud.
En definitiva, comer o no picante en la lactancia es una decisión personal y sus riesgos dependerán de si el picante produce alguna reacción negativa específica en la madre como en el bebé, como por ejemplo alergias, gases o diarrea, en cuyo caso deberían evitarse.
Cómo comer picante en la lactancia
Como hemos comentado anteriormente, comer alimentos picantes puede ser bueno para el bebé porque lo expondrá a diferentes sabores en la leche materna. Por lo tanto, no es necesario limitar su ingesta durante la lactancia, ya que tampoco cambiará el sabor de la leche a muy fuerte o amargo hasta el punto de ser intolerante para tu bebé.
Posteriormente, puedes incluir los alimentos picantes en sus comidas favoritas o de la forma que utilices para que pruebo nuevos alimentos normalmente. Lo ideal es que pueda introducirlos de forma pausada y en moderadas cantidades.
Señales de alarma al darle comidas picantes a tu bebé
A pesar de que en un principio no deberían haber problemas al introducir en la dieta del bebé alimentos picantes, siempre es recomendable estar alerta ante posibles señales de alarma después de darle cualquier alimento nuevo. En el caso específico del picante, es importante prestar especial atención a los siguientes comportamientos o señales:
- Parece inquieto o llora más de lo normal.
- Tiene signos de malestar estomacal.
- Tiene gases.
- Tiene síntomas de alergia o de intolerancias alimentarias.