recién nacido duermeAlgunos estudios han corroborado que dormir boca abajo hace presión sobre la mandíbula del bebé, estrechando las vías respiratorias y dificultándole la respiración.

Además, dormir boca abajo puede aumentar el riesgo de que el recién nacido vuelva a respirar el aire de su propia exhalación, sobre todo, si tiene cerca algún elemento blando como ropa de cama o muñecos de peluche. Entre su cara y el objeto se queda retenido el aire exhalado y el niño disminuirá el nivel de oxígeno de su cuerpo, acumulando dióxido de carbono.

Durante las primeras semanas de vida del bebé, algunos padres optan por compartir la habitación con él. Compartir la habitación con un bebé consiste en acostar al bebé en una cuna, cunita portátil o moisés dentro de la habitación de sus padres, en vez de dejarlo dormir en una habitación independiente. Esto permite tener al bebé cerca por la noche y facilita las tomas, así como la posibilidad de consolarlo y de supervisarlo por la noche. La Academia Americana de Pediatría (AAP) recomienda compartir la habitación con el bebé sin compartir la cama.

A continuación te damos 20 consejos prácticos para dormir al bebé recién nacido

1. Debes acostar al bebé siempre boca arriba. Dormir boca abajo duplica el riesgo de muerte súbita. La posición de lado no es segura, pues el niño puede acabar boca abajo. No te preocupes porque el bebé pueda atragantarse si regurgita la leche puesto que, si eso pasa, tragará o toserá de forma refleja.

2. El bebé debe dormir solo.

3. En los primeros meses de vida es mejor que duerma en su cuna y dentro de la habitación de los padres, que podrán supervisar su sueño.

4. El colchón de la cuna del bebé debe ser firme. Huye de colchones blandos.

5. No pongas al bebé sobre una almohada.

6. No le acuestes en un sofá.

7. Mantén al bebé lejos de los cojines.

8. No le des un peluche para dormir.

9. Prohibido abrigar demasiado a tu hijo.

10. Bajo ningún concepto le pongas gorro para dormir.

11. Cuidado con la calefacción. Las altas temperaturas también son un riesgo añadido.

12. Las temperaturas demasiado frías también son contraproducentes.

13. La lactancia materna reduce hasta en un 50% el riesgo de muerte súbita.

14. No fumes durante el embarazo ni en el posparto y evita que nadie lo haga en presencia del bebé. ¡Es el momento para dejarlo definitivamente!

15. Deja el alcohol y drogas durante el embarazo y durante la crianza del bebé.

16. El chupete aleja el riesgo de SMSL.

17. Airea la habitación donde duerma el bebé.

18. Respeta el calendario de vacunación Se ha demostrado que en los niños vacunados disminuye en un 50% la probabilidad de muerte súbita.

19. Por el día, cuando tu bebé esté despierto, ponlo boca abajo a ratos cortos para fortalecer sus músculos. Muchos padres huyen de ponerlo boca abajo y esto puede provocar que el bebé no sea capaz de sujetar su cabeza.

20. Informa de todo esto a las personas que estén al cuidado del bebé (abuelos, niñera, etc.).

¡Pero sobre todo recuerda colocar a tu bebé siempre en posición supina! Es el factor de riesgo modificable más importante.

Es posible que al cerebro de tu bebé le lleve varias semanas aprender a distinguir entre el día y la noche. Lamentablemente, no hay trucos para acelerar este proceso, pero puede ayudar el hecho de mantener el silencio y la calma durante las tomas y los cambios de pañal nocturnos. Intente mantener las luces en penumbra y resístase al deseo de hablar o jugar con su bebé. Esto reforzará el mensaje de que la noche es para dormir. De ser posible, deja que tu bebé se duerma en su cuna o moisés por la noche para que aprenda que ese es el lugar adecuado para dormir.