Para los niños un peluche tiene un gran significado en su vida ya que lo llegan a considerar como su mejor amigo, teniendo así un papel muy valioso en su desarrollo emocional y cognitivo.

Como ya mencionamos en el párrafo anterior, los peluches les aportan beneficios emocionales y a su vez tienen un papel clave en el desarrollo sensitivo y cognitivo. Las ventajas de que nuestros hijos e hijas jueguen con peluches son incontables, pero aquí te dejamos algunas de las más destacadas:

#1 Disminuye el estrés y la ansiedad

Contar con un peluche puede ayudar a los más pequeños a disminuir sensaciones negativas como miedo, estrés…Como resultado de algún evento o cambio importante para ellos (el inicio del colegio, la visita al médico, ausencia de un ser querido, etc.). Por esta razón, poder contar con la compañía de su peluche favorito les aporta compañía y seguridad.

Los peluches para bebés son blanditos y satisfactorios por lo que su agradable tacto tiene la capacidad de normalizar la presión arterial, aportar calma y crear mayor cantidad de endorfinas. Pueden incluso ayudar a los niños y niñas a que crean en la capacidad de buscar consuelo por sí mismos, algo muy importante durante esta etapa de su vida.

#2 ayuda a que los pequeños exterioricen sus emociones

Interactuar con peluches favorece que los más pequeños y pequeñas admitan y entiendan sus emociones y sentimientos más complejos a través del juego simbólico con estos objetos.

De esta forma, se comunican y hacen partícipe al peluche de sus mayores miedos y preocupaciones o de emociones como la tristeza, el miedo, el enfado…Una manera para que los adultos también comprendamos lo que están sintiendo nuestros hijos e hijas naturalmente y sin forzarlos.

#3 Estimula su creatividad

Tener conversaciones con los peluches, crear situaciones imaginarias, imaginar juegos y dotar a los mismos de cualidades y personalidad propia, va a incrementar la imaginación y creatividad de nuestros pequeños.

#4 ayuda a desarrollar el lenguaje

Siguiendo la línea del párrafo anterior, al interactuar con peluches y crear juegos de simulación en los que son partícipes de los mismos, esta actividad estimulará el desarrollo del habla y las capacidades del lenguaje. Los peluches para bebés consiguen que practiquen a través del juego sus habilidades de comunicación. Si nosotros mismos nos unimos a dicho juego participando en la representación simbólica, fomentaremos aún más su desarrollo lingüístico, ya que hablar en voz alta es una pieza clave de este juego. También afianzaremos la relación con nuestros hijos e hijas al estar presente en estos momentos lúdicos e importantes para ellos. Es vital que los motivemos a que hablen en el juego de manera natural.

#5 incrementa la responsabilidad y la empatía

Muchos pequeños simulan que los peluches son sus hijos o alguien a quien tienen que cuidar y al asumir dicho papel, aumentan sus capacidades de empatía y comprensión hacia los demás, poniéndose en su papel. Como añadido, cuidar de su peluche les brinda el sentido de la responsabilidad y atención hacia los demás, fomentando la empatía y compasión.

#6 Ayuda a entender la separación momentánea de sus padres al irse al trabajo

Al tener la compañía de su peluche favorito, los pequeños/as pueden hacer frente de la mejor manera posible a la ausencia de sus padres durante un tiempo del día, ya que se sentirán acompañados y protegidos.

#7 les da independencia

Hacer que participen en hábitos y rutinas de la realidad cotidiana, va a conseguir que interioricen de manera más rápida rutina, actividades, etc.

Igualmente, si ellos asumen el papel de mando, consiguen mayor autonomía con el peluche como su amigo inseparable.

En definitiva, creemos que con este artículo ha quedado claro el papel tan importante que los peluches tienen en la vida de los más pequeños y pequeñas y cómo les ayudan a desarrollarse emocionalmente a lo largo de los años.