¿Cuál es el momento ideal para comenzar a dar cenas a mi bebé? Pues es una buena pregunta y la respuesta no es fácil. Lo ideal es que se haga cuando realmente muestren interés por comer otra cosa que no sea leche por la noche. Y eso es muy subjetivo, depende de cada pequeño. Es cierto que sobre los nueve o 10 meses ya ha pasado el tiempo suficiente de convivencia entre la lactancia materna o artificial y la alimentación complementaria para que los horarios de comidas se hayan convertido para él en una rutina más de su día a día.

En cualquier caso, lo importante es que tome toda la cantidad de leche diaria que recomiendan los profesionales. Si no la ha tomado durante el día y por la noche no se suele despertar mucho para comer, no hace falta darle nada de cenar. Mejor una toma o un biberón de leche. Pero si sí la ha tomado y parece interesado y activo, pues se le puede ofrecer algo de cenar. En este caso, podemos ofrecerle algo que estemos comiendo nosotros (y que pueda comer el bebé, obviamente). Así nos evitamos desechar comida.

¿Qué puede cenar un bebé?

Pues desde un trozo de pan, alguna verdura, sopa, crema, algo de pasta… Como ya he dicho en el anterior párrafo, es buena idea preparar nuestras cenas con alimentos que puedan tomar ellos, por si les apetece probar algo. Así lo hicimos en casa y funcionó bastante bien.

De esa forma, los peques van asimilando el momento de la noche y la cena con sus padres como un ritual más de la familia. En el caso de los bebés pequeños, hay que ser precavidos con las proteínas, sobre todo en horario nocturno, porque sus riñones aún no son muy maduros para procesarlas. No obstante, si a lo largo del día no las han tomado, no pasa nada porque cenen algún alimento que las contenga.

A medida que vayan creciendo, lo ideal es que las cenas incluyan verduras, proteínas y cereales integrales o tubérculos para que sean equilibradas. ¿En qué cantidades? En un principio en proporciones similares; luego, las verduras han de ocupar la mitad de todo lo que se consuma y la otra mitad repartida entre el resto.

Cuando es el momento ideal para la introduccion de la cena en los bebes

Si bien cientificamente no hay fecha determinada para la introduccion de la cena en la dieta del bebe, y esta puede ofrecerse a partir de los 6 meses, lo cierto es que, debido a los horarios habituales de comidas en Espana y otros paises latinos, es muy dificil que un bebe pequeno no este cansado a la hora de la cena, haciendo complicado que se interese por la comida.

En otros paises europeos, sin embargo, es mucho mas habitual ofrecer alimentos en la cena que a la hora de la comida, puesto que es la que se considera comida principal, la mas contundente, y en la que se reúne toda la familia a la mesa, claro, que se realiza alrededor de las 5 de la tarde.

¿Cómo introducir la cena en bebés?

Centrándonos en nuestros horarios habituales, la cena en bebés puede introducirse, sin forzarle, cuando este sea capaz de estar lo suficientemente activo para mostrar interes por lo que los demás están haciendo. No sirve de nada hacerlo cuando el bebé esta cansado y adormilado, solo conseguiremos pasar todos un mal rato y hacerle asociar la comida con un momento desagradable.

Además, y dado que el bebé hará poco o nada de ejercicio después de cenar, debe ser  ligera y de facil digestión. Por ejemplo, no es conveniente ofrecerle dos platos, salvo que el primero sea muy ligero, como un puré o una sopa. Por otra parte, las carnes son mas pesadas de digerir que los pescados, y los huevos fritos mas que las tortillas.

Con respecto a la cantidad, sera el bebé el que decida cuanto quiere comer, y aunque muy probablemente no habrá dos dias iguales, debemos respetar su ritmo. Es muy probable que, si se ofrecen dos platos, el bebé solo muestre interés por el primero, por lo que puede resultar mas apropiado colocar todos los alimentos que se quieran ofrecer en un único plato, todos juntos para que pueda escoger y probar.

Al principio, y debido a que el bebé no comerá demasiado en la cena, es conveniente continuar ofreciendo un biberón de leche antes de acostarse. Si se continúa con la lactancia materna, por supuesto tambien debe ofrecerse esta a demanda. Cuando los bebés son mas grandes y ya no toman biberón, ofrecer un vaso de leche antes de acostarse o con la propia cena, puede ayudarnos a asegurar que consume el calcio suficiente para sus huesos y a comenzar con la rutina de antes de dormir, ya que la leche, y más si es calentita, favorece la relajación.