Definitivamente el tabaco crea gran dependencia en las personas que suelen consumirlo habitualmente. Y, cabe resaltar que los efecto snegativos que este tiene sobre la salud del ser humano son incalculables, a la vez que reducen la calidad y el tiempo de vida de manera significativa.
Se ha logrado establecer que el número de mujeres fumadoras va cada vez más en aumento, esto incluyendo a las embarazadas, lo que hace que sus bebés sufran también las consecuencias que pueden llegar a ser:
- Bajo peso al nacer.
- Mayor riesgo de muerte fetal.
- Partos prematuros.
- Problemas respiratorios.
- Asma
Si esto no es suficiente motivación para dejar el tabaco a un lado, a continuación, te daremos 12 consejos para dejar de fumar en el embarazo.
Trata de ser lo más realista posible
Dejar de fumar puede ser difícil, pero es algo que puedes conseguir si te lo propones. Es un hábito muy nocivo que deteriora tu salud y la de tu bebé. La ansiedad derivada de la ausencia de nicotina nunca va a ser peor que fumar un cigarro, por lo que no vale de excusa para caer en la tentación.
Ten objetivos claros
Estoy embarazada y no puedo dejar de fumar, ¿qué hago? Encuentra objetivos que te motiven y que puedas cumplir para conseguirlo como los siguientes:
- No comprar más tabaco.
- Marcar un día límite para dejarlo por completo.
- Reducir progresivamente el número de cigarros diarios hasta dejarlo.
Ir cumpliendo los objetivos que te has propuesto te ayudará a dejar de fumar en el embarazo más fácilmente.
Crea nuevas rutinas
Si te preguntas cómo puedo dejar de fumar en el embarazo, debes saber que hay muchas formas. Si te fijas, todas las personas fumadoras tienen una rutina con el tabaco, aunque sea de forma inconsciente, por ejemplo, el cigarro de después de comer, el de después del café, etc.
Cambia esas rutinas por otras como tomar zumo en vez de café, dar un paseo después de comer o darte una ducha. Así, poco a poco, la necesidad de fumar en esos momentos desaparecerá.
Haz planes y cosas divertidas
Si tienes ganas de fumar, intenta distraerte con algo que te guste mucho como leer un libro, ponerte tu serie favorita, hacer un puzzle, etc. Cualquier cosa que mantenga tu mente y tus manos ocupadas es buena para dejar de fumar en el embarazo.
Busca apoyo en tus amigos y familiares cercanos
Si buscas ayuda para dejar de fumar estando embarazada, es importante que tus amigos y familiares sean conscientes de que estás dejando de fumar para que puedan ayudarte. Dales instrucciones a seguir en caso de que tengas ganas de encender un cigarrillo, que eviten hablar del tema o que no fumen en tu presencia son tips que pueden ayudarte.
Pídeles también que sean pacientes contigo, ya que el síndrome de abstinencia puede afectar a tus emociones.
Trata de evitar tener cerca a personas fumadoras
Ver a otras personas fumar puede incentivar tus ganas de hacerlo. Evita ir a lugares como terrazas de bares o quedar con gente que vaya a fumar delante de ti durante unos días hasta que puedas controlar la situación. Si dejar de fumar en el embarazo te produce ansiedad, en este artículo verás cómo combatir la ansiedad por dejar de fumar.
Trata de mantener tus emociones controladas
Las emociones juegan un papel fundamental en las adicciones. Es más fácil caer en el tabaco si estás enfadada, triste, aburrida o muy emocionada. Por ello, para dejar de fumar en el embrazo es importante que identifiques cada una de ellas e intentes buscar alternativas para gestionarlas.
Por ejemplo, si estás aburrida, levántate y ponte a hacer algo que te guste, si estás triste mira fotos que te transmitan alegría, habla con amigos o familiares, etc.
No descartes apoyarte en un profesional
Si no has llegado a cumplir algún objetivo propuesto, te puede la ansiedad o no logras dejarlo por ti misma, no te mientas a ti misma ni le restes importancia. Busca ayuda profesional y acude a terapia para dejar de fumar en el embarazo.
Trata de sacar de tu vida todo aquello que te recuerde el cigarrillo
Tira todos los mecheros que tengas por casa, deshazte de todos los cigarrillos y evita pasar por la puerta del estanco. En definitiva, deshazte de todas las pequeñas tentaciones que puedan hacerte caer en cualquier momento. Si no hay tabaco en casa, es imposible fumar estando embarazada.
Trázate objetivos a corto plazo
Si crees que es imposible dejar de fumar de golpe, intenta hacerlo de forma progresiva con objetivos pequeños. Puedes empezar reduciendo la dosis de cigarros, anotando los que fumas al día, comprando menos paquetes, etc. Ante todo, es importante que anotes tus avances para que sientas tu progreso.
Date algún capricho como recompensa
Cuando logres alguno de tus objetivos para dejar de fumar en el embarazo, recompénsate de algún modo como, por ejemplo, ve a la peluquería, date un baño relajante, cómprate algo nuevo o lo que tú prefieras.
Recuerda que lo más importante es la salud de tu bebé
Las sustancias nocivas del tabaco traspasan la placenta y la envejecen, haciendo que no le lleguen bien todos los nutrientes ni el oxígeno necesario al feto. Por ello, fumar en el embarazo aumenta las probabilidades de malformaciones, bajo peso del bebé, muerte fetal, abortos espontáneos o problemas respiratorios, entre otras problemas.
Además, cuando los bebés de madres fumadoras nacen, suelen estar más irritables, ya que tienen también síndrome de abstinencia. Tu bebé es la persona a la que más vas a querer jamás. Si no lo haces por ti, hazlo por él.