Lograr identificar las inclinaciones y aptitude de tus hijos es un proceso un poco complejo y a menudo confuso, pero fundamental para ayudarles a sacar a flote todo su potencial. Por suerte, existen señales que podemos buscar para entender mejor sus gustos y detectar cada una de sus habilidades. En parasubebe vamos a tocar algunas de las señales más comunes a las cuáles debemos prestar mucha atención para detectar sus destrezas y desarrollarlas al máximo.
Señales principales de vocaciones en los niños:
Pese a que son muchas las habilidades que nuestros hijos pueden mostrar a lo largo de su desarrollo, algunas de las más interesantes son las siguientes:
#1 Habilidades y talentos innatos
Otra señal importante de la vocación de un niño son sus habilidades y talentos naturales, por lo que resulta fundamental prestar atención a las actividades en las que sobresale. Si tu hijo tiene una habilidad especial en ciertas áreas, como la resolución de problemas, la creatividad o la comunicación, puede ser una clara señal de su vocación.
Si quieres ayudar a tu hijo a desarrollar sus habilidades y talentos, debes ofrecerle oportunidades para que practique y mejore en esas áreas. Por ejemplo, si tu hijo tiene habilidades naturales en la resolución de problemas, dale oportunidades para resolver problemas y tomar decisiones en situaciones de la vida real. Si, por otro lado, sus habilidades creativas son las que destacan, puedes darle la oportunidad de explorar diferentes formas de arte y expresión creativa.
#2 Personalidad
La personalidad y el estilo de aprendizaje de tu hijo también pueden ser señales importantes de su vocación. Prestar atención a la manera en la que aprende y cómo se relaciona con los demás te dará la clave para buscar actividades con las que explotar sus fortalezas.
Así, podemos decirte que, si tu hijo es un pensador lógico y analítico, es posible que tenga una vocación en áreas como la ciencia o la tecnología. Por el contrario, si tu hijo es un comunicador natural y se relaciona bien con los demás, puede tener una vocación en áreas como la enseñanza o la psicología.
Para ayudarle, nada mejor que ofrecerle materiales visuales, así como oportunidades para escuchar y discutir temas y conceptos. También puedes dejarle que participar en actividades sociales y de liderazgo.
#3 Intereses y pasatiempos
Uno de los signos más obvios de la vocación de un niño es su interés en ciertas actividades o pasatiempos. Observa a tu hijo y presta atención a las actividades que disfrutan y que buscan activamente. Si tu hijo tiene un interés particular en un área, como la música, la escritura o el dibujo, es posible que tenga una vocación en esta área.
Para ayudarle a desarrollar su vocación, fomenta sus intereses y bríndale oportunidades para que practique y mejore en esas áreas. Si tu hijo tiene interés en la música, considera inscribirlo en clases de música o comprarle un instrumento musical. Si está interesado en la escritura, dale la oportunidad de participar en un taller de escritura o comprarle libros para fomentar su amor por la lectura.
#4 Perspectiva y enfoque
La perspectiva y el enfoque de tu hijo también pueden ser una señal importante de su vocación. En este sentido, debes prestar atención a la facilidad de tu hijo a la hora de buscar solución a los problemas y de encontrar soluciones creativas. Si percibes estas características, casi seguro que la vocación de tu hijo está relacionada con la tecnología o la ingeniería. Por otro lado, si tu hijo se enfoca en las relaciones interpersonales y la comunicación, su vocación puede estar relacionada con la psicología o la enseñanza.
#5 Comportamiento y actitudes
El comportamiento y las actitudes de tu hijo también son decisivos a la hora de identificar señales vocacionales. Por ello, es crucial prestar atención a la manera en la que tu hijo se relaciona con el mundo. Si tu hijo es curioso y le gusta explorar y descubrir cosas nuevas, puede tener una vocación en áreas como la ciencia o la investigación. Por el contrario, si es un niño compasivo y empático, puede sobresalir en áreas como la ayuda social o la psicología.
Para ayudarle nada mejor que dejarle participar en actividades que fomenten su curiosidad y empatía: búscale actividades en las que pueda explorar el mundo que le rodea y relacionarse con los demás. Si es compasivo, puedes buscarle, por ejemplo, proyectos de ayuda social o voluntariado.
#6 Preguntas y curiosidad
Las preguntas y la curiosidad son otras de las señales vocacionales que podemos distinguir en los niños. Por ello, si tu hijo es de los que se pasa el día preguntando y cuestionando todo, puede que su vocación esté relacionada con la ciencia, la investigación o la educación. Por ello, debes fomentar esta curiosidad y ofrecerle cualquier actividad o experiencia que le ayude a explorar y aprender cosas nuevas.
¿Cómo potenciarlo? Ofrécele respuestas, llévalo a museos, visita bibliotecas, … Todo lo que le sirva para aprender y calmar sus necesidades de conocimiento será una excelente opción para ayudarle a explotar todo este potencial que hay en él.
Actividades con las que pueda desarrollar sus habilidades sociales, así como todas aquellas situaciones en las que pueda activar su pensamiento crítico, serán adecuadas para él. Además, no dudes nunca a la hora de tratarle como “un adulto”, ya que estos niños suelen tener curiosidad más allá del mundo infantil.
Nuestros hijos presentan señales claras de su vocación a edades muy tempranas. Sin embargo, estas pueden pasar desapercibidas por los padres, algo que no les beneficia. Por ello, es fundamental estar pendiente de ellas y buscar todas aquellas situaciones en las que puedan desplegar el gran potencial que encierran.