niña ahorrando con mamáEducar financieramente a nuestros hijos, desde pequeños les ayuda a valorar el dinero. De esta forma, no solo serán conscientes del esfuerzo que deben hacer sus padres para conseguirlo y comprar un simple juguete, su comida, pagar sus gastos escolares, sino que también aprenderán a valorar más sus posesiones. A continuación te mencionaremos una lista de los beneficios de enseñar a nuestros hijos el valor del ahorro, del dinero y del trabajo que se debe hacer para conseguirlo:

Aprenden a vivir según sus posibilidades: esto les ayuda a nivelar un poco sus deseos y a ser más realistas con los ingresos del hogar. Un aprendizaje que le servirá para evitar deudas innecesarias en un futuro.

Crea su capacidad de ahorrar y minimiza los hábitos de consumo compulsivos: Cuando los niños tienen una buena educación financiera son capaces de ahorrar más, un hábito que a largo plazo les ayudará a tener una mayor seguridad económica. Asimismo, es una buena manera de enseñarles a consumir de manera responsable.

Aprenden a tener control sobre sus finanzas y pueden elegir qué desean o pueden comprar y qué no: Aprender a gestionar los ingresos y los gastos es fundamental para tener una estabilidad económica a largo plazo. Contar con una educación financiera contribuye a que los niños aprendan a gestionar sus finanzas personales desde una edad temprana, un hábito que mantendrán cuando sean independientes económicamente.

Invierten sus ahorros de forma inteligente: Invertir es una buena manera de generar una fuente de ingresos pasivos y conseguir una mayor estabilidad económica. Sin embargo, para obtener beneficios con una inversión es importante aprender a invertir de manera inteligente. Un aprendizaje que los niños pueden adquirir con una buena educación financiera.

Aprender a pensar 2 veces antes de comprar algo, se cuestionan si realmente es algo que necesiten: Contar con una educación financiera también puede proteger a los niños a la hora de gastar el dinero, evitando que caigan en estafas o inviertan en áreas de dudosa rentabilidad. Básicamente, es una buena manera de enseñarles a ser precavidos al gastar e invertir el dinero cuando crezcan.

5 Consejos financieros que debes enseñar a tus hijos desde pequeños

La educación financiera debería formar parte del currículo académico en los colegios. Desdichadamente, no existen materias que enseñen a los niños a gestionar el dinero y manejar su economía personal. Por eso, es importante que los padres transmitan a sus hijos algunas de las enseñanzas que han aprendido a golpe de experiencia. He aquí algunas de las lecciones básicas sobre finanzas personales que todo niño debería conocer.

El verdadero significado de la palabra dinero

Enseñar a los niños a valorar el dinero es fundamental para que aprendan a gestionar sus finanzas personales cuando sean adultos. Los niños deben aprender desde una edad temprana de dónde proviene el dinero y el esfuerzo que requiere ganarlo, lo cual les ayudará a utilizarlo de manera más responsable. Asimismo, deben conocer que existen diferentes maneras de generar ingresos, pero que en todos los casos se requiere un aporte de valor, ya sea porque se brinda un conocimiento, una destreza o un resultado.

Una buena manera de inculcarles esta lección consiste en explicarles cómo llega el dinero a casa y cómo se gasta en el día a día. También puedes darles una paga simbólica por colaborar en algunas de las tareas domésticas que no formen parte de las que tienen asignadas en casa. Se trata de una buena forma de que aprendan a esforzarse para ganar su propio dinero, lo cual les ayudará a valorarlo aún más.   

Los beneficios del ahorro

Aprender a ahorrar es otra de las lecciones básicas sobre finanzas personales que los niños deben dominar desde una edad temprana. Para ello, es importante enseñarles por qué es importante ahorrar, así como la diferencia entre el ahorro a corto plazo, destinado a la compra de unas zapatillas nuevas o un teléfono móvil, y el ahorro a largo plazo, dedicado a comprar un coche, una vivienda o para hacer frente a imprevistos.

Sin embargo, para darles a los niños una buena educación financiera no basta con explicarle el concepto del ahorro sino también cómo llevarlo a la práctica. Por tanto, puedes proponerles algunos métodos de ahorro, invitándoles por ejemplo a guardar el 10% de los ingresos de la paga del mes o 50 céntimos por cada dos euros que les regalan.

la diferencia entre deseos o necesidades

Sin duda, uno de los conocimientos clave que los niños deben aprender para tener una buena educación financiera es la diferencia entre necesidad y capricho. A medida que crecen, los pequeños deben conocer que una de las bases fundamentales de unas buenas finanzas personales es contar con un sistema de prioridades que anteponga las necesidades básicas sobre las secundarias y/o caprichos. De ahí que el primer objetivo consista en cubrir las necesidades básicas de alimentación, suministros básicos, vivienda y similares antes de permitirse otros gastos superfluos.

consumo consciente

Otra parte importante de la educación financiera consiste en inculcar a los más pequeños de casa un consumo racional y responsable. Los niños deben aprender que para tener una seguridad y estabilidad económica deben gastar en función de los ingresos y no de manera impulsiva e irracional. Aprender a gastar sin sobrepasar sus posibilidades económicas no solo les permitirá ser conscientes de su nivel de ingresos, sino que les ayudará a no endeudarse en el futuro.

importancia de las entidades financieras

Los niños también necesitan conocer cuál es el rol que desempeñan las diferentes entidades financieras dentro de la economía y qué impacto tienen en sus finanzas personales. Cuanto antes conozcan qué son los bancos y qué servicios brindan, qué es una cuenta corriente, un préstamo o un fondo de inversión, más preparados y mejor informados estarán para planificar sus finanzas y tomar decisiones económicas en el futuro.