Durante el embarazo se producen ciertos cambios que pueden resultar molestos para la madre, entre estos se añade el aumento de los gases o flatulencias que se dan a partir del primer trimestre. Cabe resaltar que estas flatulencias son inofensivas y no presentan ningún tipo de problema para la madre o el bebé, a parte de lo molestas que pueden resultar ya que si se acumulan en exceso pueden resultar en dolor e hinchazón. Los especialistas aconsejan seguir ciertos consejos para evitarlas en gran medida, pero, en caso de que se presentenm que es lo más probable, también existen ciertas posiciones corporales que puede adoptar la embarazada para expulsar esos incómodos gases.
Estas son las posturas que la mujer puede tomar para eliminar los gases más fácilmente y evitar que estos se acumulen en el abdomen y produzcan síntomas molestos:
#1 Hacer yoga
El yoga mejora el sueño, rebaja el estrés y la ansiedad, aumenta la fuerza, la flexibilidad y la resistencia de los músculos que se ven involucrados en el parto, ayuda a que disminuya el dolor en la zona baja de la espalda y el de cabeza, favorece la desaparición de las náuseas y facilita la respiración.
#2 Estirar el vientre
Uno de los pies da un paso atrás manteniendo ambos mirando al frente. Se entrelazan las manos frente a la cintura y se elevan los brazos poco a poco por encima de la cabeza de modo que se va arqueando sin forzar la zona lumbar, pero se mantiene la columna recta. Con este ejercicio, que se puede hacer unas cinco veces, se produce un estiramiento de los músculos abdominales.
#3 Levantar los brazos:
Es tan sencillo como colocarse de pie con la espalda recta y levantar los brazos hasta alinearlos con la cabeza. Repetir diez veces.
#4 Giro de piernas:
Tumbarse boca arriba en un lugar cómodo, flexionar las rodillas y apoyar las plantas de los pies. Después colocar los brazos sin estirarlos junto a la cabeza y girar la cadera llevando las rodillas hacia un lado y después hacia el otro. La espalda y los hombros se mantienen pegados al suelo y estables. El movimiento debe ser suave mientras se respira profundamente y se puede realizar unas diez veces.
#5 Encoger y relajar:
Con los pies separados entre ellos a una distancia de un palmo, se apoyan las manos en las rodillas de modo que se redondea un poco la espalda. En cuanto a la cabeza, no se baja demasiado para no forzar las cervicales. Consiste en realizar tres respiraciones suaves completas en esta postura para volver a la posición vertical. Se necesita repetir unas cinco veces.
#6 Masaje alrededor del ombligo:
Para este masaje se pone una mano encima del ombligo y la otra debajo para hacer círculos a su alrededor de derecha a izquierda, en el sentido de las agujas del reloj. Realizarlo antes de levantarse de la cama y al acostarse facilita el tránsito intestinal.
#7 Masaje bajo las costillas:
Se colocan los dedos en la parte alta del estómago, justo debajo de las costillas, y se fricciona la zona de arriba hacia abajo unas veinte veces.
#8 Realizar estiramientos:
Permiten mantenerse elástica y flexible y mejoran la postura. Lo más beneficioso es que disminuyen las molestias musculares, los tirones y los calambres que principalmente padecen las embarazadas en las pantorrillas y en los gemelos. Además, muchos fisioterapeutas disponen de contenido visual con estiramientos prenatales específicos.
#9 Caminar:
El ejercicio físico suave para las embarazadas es básico si no hay contraindicaciones médicas. Andar a diario libera el estrés, activa la circulación sanguínea, facilita la digestión, libera los gases y evita el estreñimiento. Después de comer es recomendable andar hasta que se empiece a digerir el alimento. El hecho de sentarse o tumbarse enseguida es lo que ralentiza al aparato digestivo y produce la acumulación de flatulencias.
#10 Tumbarse:
Echarse de lado con las piernas flexionadas y relajarse posibilita la expulsión de los gases. Aunque hay que recordar que es mejor no tumbarse después de las comidas.
Recuerda que las flatulencias y gases en el embarazo son síntomas comunes de la etapa, no te preocupes y ten en cuenta que siempre será mejor optar por remedios naturales en lugar de medicamentos para solucionarlos.