posicionador para bebéCuidar todos los aspectos que repercuten en la salud integral de los bebés es la mayor preocupación de los padres de familia. Es por ello que recurren algunas veces a productos que prometen una máxima seguridad, aunque lamentablemente pocas veces cumplen su promesa.

Uno de estos productos son los denominados protectores para dormir -también conocidos como ‘nidos’ o respaldos-, los cuales garantizan el bienestar de los bebés mientras duermen de forma segura. Pero, ¿qué opinan los expertos en salud sobre su uso?

En los últimos años, los posicionadores para dormir se han convertido es un elemento indispensable para muchos padres. Se trata de un accesorio similar a un colchón fino que incluye almohadas o apoyos ligeramente levantados, a la altura de los pies o la cabeza del bebé, que sirven para apoyarse y dormir con mas comodidad.

Los también conocidos como nidos, estan destinados a mantener al bebe en una posición especifica mientras duerme, ya sea de espalda o costado, para que pueda descansar mejor y evitar asi, que se mueva continuamente en la cuna. Están pensados para bebés de hasta seis meses, aunque determinados modelos se pueden usar hasta los ocho o nueve meses.

Los cojines antivuelco o posicionadores estan diseñados para bebés de menos de seis meses y cuentan con un cilindro a cada lado (o uno de ellos) para mantener al bebé de costado o de espaldas, o una cuna para levantar la cabeza del bebé. Alertan sobre el riesgo de que el bebé se mueva mientras duerme y se quede atrapado entre los cojines, asfixiandole.

Algunos estudios han encontrado que los posicionadores para dormir ayudan a prevenir el reflujo en los bebés, asi como el sindrome de cabeza plana, una deformación causada principalmente por la presión continua sobre una parte del cráneo.

De hecho, a partir de los informes recibidos por la propia FDA en 2010 sobre la posible relación de los posicionadores de sueño con un mayor riesgo de asfixia en los bebés, dicha organización solicito dejar de comercializar estos accesorios, al menos hasta que se demuestre que sus beneficios superan los riesgos.

Posicionadores para dormir: ¿Mayor riesgo de asfixia?

Se estima que cada ano mueren unos 4.000 bebés por asfixia accidental, el sindrome de muerte súbita del lactante o debido a causas desconocidas. De ellos, se han reportado algunas muertes relacionadas con el uso de los posicionadores para dormir.

La relacion entre el uso de los posicionadores para dormir y el incremento del riesgo de muerte súbita del lactante. Los posicionadores para dormir aumentan el riesgo de asfixia y muerte súbita en el bebe. En la mayoria de los casos se debe a que el bebé cambia de posición y pasa a estar de costado a colocarse boca abajo, lo cual hace que su cabeza se hunda sobre la superficie blanda del posicionador, impidiendole respirar con normalidad.

Tambien se han recibido reportes sobre bebes cuyos padres los colocaron de costado o boca arriba en los posicionadores y luego los encontraron en posiciones peligrosas, tanto dentro de estos accesorios como entre estos y la cuna. De cualquier forma, la Academia Estadounidense de Pediatria también recomienda evitar el uso de los posicionadores para dormir, sobre todo despues de los tres meses, una edad en la que el bebe empieza a moverse mientras duerme, lo cual aumenta el riesgo de morir por asfixia.

Recomendaciones para que tu bebé duerma seguro

  • No utilices los posicionadores para dormir, si no puedes mantener vigilado al bebé. Estos pueden ser una buena opción para acostar a tu pequeño por la tarde mientras puedas observarlo, pero para la noche sera mejor que lo acuestes sobre una superficie firme como su cuna.
  • Acuesta al bebe siempre boca arriba por la noche, de esta manera tendra despejadas sus vias respiratorias, una estrategia muy útil para prevenir el riesgo de asfixia y del sindrome de muerte súbita del lactante.
  • Manten la cuna o cama del bebé libre de accesorios ya que pueden incrementar el riesgo de asfixia. Evita los juguetes blandos, las almohadas, otros objetos suaves e incluso las mantas y adredones, que pueden dificultar el flujo adecuado de aire.
  • Evita acostar al bebe inmediatamente tras una toma de leche. De esta manera, previenes el reflujo gastroesofagico y reduces el riesgo de asfixia nocturna.